El subsecretario de Estado norteamericano, Kevin O’Reilly, dijo que desde la administración de Trump esperan que “haya una claridad sobre la duración de las medidas y la dirección de las políticas económicas”. Alertó sobre el avance de China, la situación de Venezuela y aseguró el apoyo al país en el FMI.
El Subsecretario Adjunto de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado de los Estados Unidos, Kevin O´Reilly, expresó que en Washington confían en que “en el futuro la Argentina pueda levantar las restricciones (económicas) que el Gobierno impuso como algo necesario para sortear la crisis”.
A lo largo de una conferencia de prensa, el funcionario norteamericano puntualizó que, por ejemplo, en el caso del congelamiento de tarifas y la declaración del gobierno de Alberto Fernández de decretar como servicio público a las empresas de telecomunicaciones, existe en Washington “una única preocupación que es el acceso a los beneficios por competir que deben tener las compañías”.
Así, O’Reilly se mostró dispuesto a que el gobierno argentino ofrezca un escenario donde se pueda competir libremente en el mercado internacional y definió una expresión de deseos ante las medidas tomadas hasta ahora por Alberto Fernández: “Ojalá que sean transitorias”, dijo.
A su vez, al evaluar las últimas medidas que el Gobierno tomó en materia económica como pueden ser los límites en la compra de dólares o el congelamiento de tarifas, el funcionario del Departamento de Estado destacó: “Respetamos las decisiones de cualquier gobierno democrático que toman para enfrentar una crisis. Al mismo tiempo, esperamos que haya una claridad sobre la duración de las medidas transitorias y la dirección de las políticas económicas nacionales”.
De cara a las inminentes elecciones presidenciales norteamericanas y su eventual impacto en las relaciones de Washington con Buenos Aires, el diplomático norteamericano sostuvo que “si cambia el color de nuestro gobierno es una decisión del pueblo norteamericano. Pero los pilares generales que compartimos de defensa de la democracia y la cooperación en la defensa de la seguridad pública se mantienen y no son partidarios. No veo un cambio abrupto de nuestras políticas hacia la región porque los intereses siguen siendo de la Nación”.
O’Reilly destacó que la Argentina y Estados Unidos se encuentran en “un momento interesante para las relaciones bilaterales” y calificó como “duradero, muy abierta y con algunas diferencias de opinión pero con una comunicación fluida” los vínculos entre ambos países.
En este sentido, el funcionario del Departamento de Estado destacó que los gobiernos de Donald Trump y Alberto Fernández comparten intereses similares y tienen un “compromiso firme con la democracia y un enfoque puesto en la recuperación económica”.
“Necesitamos de una Argentina prospera y que maneje su deuda en un país abierto y democrático y vamos seguir promoviendo este tipo de relación hacia el futuro. No hay nadie que se beneficie si Argentina no es próspera. Confiamos en que Argentina siga siendo un socio confiable”, dijo el diplomático norteamericano que en los años 90 ocupó un puesto clave en la embajada de Estados Unidos en Buenos Aires.
Con respecto a los últimos acercamientos que hubo de parte de Alberto Fernández al gobierno de China y sus contactos con Xi Jinping, el funcionario norteamericano dijo que Washington había tomado nota de esto pero advirtió: “Vemos que muchos gobiernos han entrado en acuerdos con China con ojos abiertos y protegiendo sus intereses. Los intereses de cualquier gobierno es mantener la posibilidad de no entrar en una relación cerrada que perjudique a la economía al país”.
A pesar de todo esto, y de que en Estados Unidos ven con mucha atención la relación de Alberto Fernandez con Xi Jinping, el subsecretario Adjunto de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado confió en que las relaciones que Estados Unidos mantiene desde el 1800 con la Argentina “seguirán en una buena dirección”.
Conferencia con empresarios
Por otra parte, en una conferencia que O’Reilly mantuvo más temprano con los empresarios argentinos y norteamericanos nucleados en la Cámara de Comercio de Estados Unidos, el diplomático norteamericano dijo que el éxodo de empresas extranjeras que se van de la Argentina respondería a “las necesidades que tienen las compañías” y al momento de crisis mundial que se vive en la pandemia.
De todas maneras, en el conversatorio con los empresarios moderado por Alejandro Díaz, director ejecutivo de la Amcham, O’Relly destacó que “la pandemia exige un un desafío enorme donde lo esencial sigue siendo que haya reglas que ofrezcan a los inversores la posibilidad de competir de manera transparente y justa”.
Así, al evaluar el futuro de la economía argentina O’Reilly dijo que en Washington propician “una Argentina con una economía fuerte y robusta”. Y evaluó como “algo positivo” el acuerdo que selló el gobierno con los bonistas por la deuda.
Al hablar del capítulo de la situación de Venezuela ante los empresarios que invierten en Argentina y en Estados Unidos, O’Reilly cuestionó al régimen de Nicolás Maduro que “quiere extinguir las últimas voces elegidas de manera democrática en su país. Esto no representa un proceso democrático abierto”.
Sin embargo, O’Reilly no quiso entrar en detalles sobre la valoración que ayer dio el embajador argentino ante la OEA, Carlos Raimundi, sobre el informe lapidario de la ONU denunciando la violación a los derechos humanos en Venezuela. Pero el funcionario norteamericano recordó que el Grupo de Contacto de diálogo con Venezuela, donde participa la Argentina, ya reconoció que no hay condiciones para una elección democrática en diciembre en el país caribeño.
En el diálogo y ronda de preguntas que mantuvo con los empresarios nucleados en la Cámara de Comercio el funcionario norteamericano también remarcó la preocupación de Estados Unidos por el avance empresas estatales chinas como Huawei en la región.
“Nuestra preocupación es en compañías como Huawei y nuestra preocupación es que los gobiernos de la región no compartan esto. Sabemos que vamos a entrar en una cooperación mundial. Pero si vamos a profundizar estas relaciones la información y la protección, la privacidad debe ser relevante. Hay que establecer no solo reglas de juego y veo una Argentina con una capacidad de investigación y mano de obra calificada en estos sectores. Ojalá que se puedan dar los marcos para que se pueda crecer en este sentido”, dijo O’Reilly en un elíptico mensaje al gobierno argentino que ya mantuvo contactos con Huawei por medio del canciller Felipe Solá.